El sistema de control de leche MilkGuard Extra es un ejemplo destacado de un equipo innovador.
La extensa investigación y desarrollo han dado como resultado la producción de un sistema de control de leche con un microprocesador avanzado, que continuamente y de forma meticulosa controla y registra todo el proceso de refrigeración y limpieza de la leche.
La leche de vaca se ordeña a una temperatura de aproximadamente 37°C, la temperatura corporal del animal. En el caso de leche fresca, de un animal sano prácticamente no se encuentran microorganismos nocivos. Sin embargo, ya que la leche fresca es un medio excelente para que se desarrollen bacterias, se debe proteger a la leche para que no se contamine luego de ordeñarla. Si la leche se almacena y refrigera de inmediato, a una temperatura de aproximadamente 3°C, se minimiza el desarrollo de bacterias.